Los trabajos para instalar el primer OPS en Hutchison Ports BEST han comenzado con el despliegue de una red de media tensión en el muelle

 

Las obras para instalar el primer Onshore Power Supply (OPS) para barcos portacontenedores ya se han iniciado en la terminal Hutchison Ports BEST del Puerto de Barcelona. Los trabajos empezaron con la apertura de las zanjas para hacer llegar la red eléctrica de media tensión hasta el mismo muelle, donde a finales de año se instalará el sistema OPS al que se conectarán los barcos.

La empresa danesa PowerCon A/S, ganadora del proceso de licitación iniciado el pasado año, es la encargada de ejecutar las obras con un presupuesto 4.978.640 euros. Los trabajos coinciden con las obras que Hutchison Ports BEST está ejecutando para ampliar su capacidad de almacenamiento en un 25%, 7 nuevos bloques para contenedores, facilitando así el trabajo de los operarios encargados de abrir las zanjas e instalar el cableado necesario para la OPS.

La OPS de la terminal Hutchison Ports BEST será el primero que se instalará en el Puerto de Barcelona en el marco del proyecto Nexígeno, que con una inversión inicial prevista de 110 millones de euros desplegará una red eléctrica de media tensión hasta los principales muelles del puerto con el objetivo de equiparlos con OPS y que los barcos que amarren puedan detener sus motores y funcionar con electricidad con certificado de origen 100% renovable y reducir así las emisiones.

La terminal Hutchison Ports BEST será la primera terminal de contenedores del sur de Europa en contar con este innovador sistema y permitirá obtener información real y útil, basada en la experiencia, del rendimiento de los OPS en barcos portacontenedores. Así, se podrán extraer conclusiones en cuanto a las mejores prácticas e identificar futuras necesidades y desarrollos para el despliegue del resto de OPS, que estarán instalados antes de 2030. El segundo piloto estará operativo en la terminal de ferrys el año que viene, permitiendo probar este sistema también en este tipo de barcos.

Cuando el Puerto de Barcelona tenga electrificados todos los puntos de atraque de los cruceros, el muelle Prat y las terminales de ferrys de la dársena de Sant Bertran y el muelle de Costa, se eliminarán 66.000 toneladas de CO2 y 1.234 toneladas de NOx de las emisiones de la actividad portuaria. Esto supone reducir el 38% del NOx y del CO2 emitidos por los barcos durante su estancia en muelle y eliminar el 22% de las emisiones de NOx y CO2 de toda la actividad portuaria. A medio plazo, la electrificación será una pieza clave para alcanzar el objetivo de reducción de emisiones del 50% en 2030 y ser un puerto climáticamente neutro en 2050.