La Autoridad Portuaria de Barcelona, el departamento de Acció Exterior y Govern Obert de la Generalitat de Catalunya y el Cuerpo Consular de Barcelona mantuvieron un encuentro el 22 de septiembre con el objetivo de fortalecer sus relaciones e impulsar nuevas líneas de trabajo que permitan afianzar la presencia en el exterior y facilitar el comercio internacional a través del recinto portuario de la capital catalana.

Al encuentro, celebrado en las instalaciones de la Autoridad Portuaria de Barcelona, han asistido representantes de 50 consulados y ha contado con la participación del presidente del Puerto, Damià Calvet, de la Consellera de Acció Exterior y Govern Obert de la Generalitat de Catalunya, Victoria Alsina, y de representantes de entidades de la sociedad civil invitadas: Barcelona Global, Cámara de Comercio de Barcelona, CECOT, Círculo de Economía, Consejo General de Cámaras de Cataluña, Fira de Barcelona, Fomento del Trabajo, PIMEC y Universidad Abierta de Cataluña ( UOC).

La reunión de trabajo se dividió en dos partes diferenciadas. En la primera parte, el presidente del Port de Barcelona, Damià Calvet, ha explicado al numeroso grupo de cónsules cuál es la estrategia de desarrollo sostenible de esta infraestructura a corto y medio plazo y como ejerce de socio del tejido empresarial para facilitar la creación de cadenas logísticas internacionales competitivas.
El Puerto de Barcelona tiene actualmente dos grandes retos que son la innovación y la sostenibilidad, dos palancas de cambio que deben llevar a esta infraestructura a otro nivel. En el primer caso, uno de los objetivos del Puerto es convertirse «en un verdadero hub de la economía azul, exportando conocimiento desde Cataluña en el mundo», ha explicado su presidente. En cuanto a la sostenibilidad, Damià Calvet ha sido muy claro en la necesidad de «hacer entre todos un esfuerzo colectivo, global, para descarbonizar la actividad». Y ha añadido que «el Puerto de Barcelona ya hace una política activa de descarbonización» para reducir en un 50% las emisiones de CO2 en 2030 y fue un puerto neutro en carbono en 2050.

Nuevo ciclo inversor
Los esfuerzos para descarbonizar la actividad portuaria, sin embargo, se deben realidad tanto en el lado mar, con el uso de combustibles limpios por parte de las navieras, como en tierra, invirtiendo en nuevas infraestructuras como la electrificación de muelles o conexiones más eficientes que favorezcan una movilidad más sostenible. «Esto iniciará un nuevo ciclo inversor muy importante en el Puerto de Barcelona», anunció el presidente. Y ha puesto como ejemplo los más de 600 millones de euros de inversión que supondrá la construcción de los nuevos accesos terrestres al recinto portuario; los 90 millones de euros destinados a electrificar los muelles o las inversiones que se harán «en la mejora de infraestructura portuaria para reordenar nuestra actividad y hacerla más sostenible, acercándola a la bocana sur».

La Consellera, Victoria Alsina, por su parte, resumió la estrategia de la acción exterior de Catalunya, articulada en cuatro ejes -presencia, excelencia, influencia y compromiso-, dirigida a incrementar su visibilidad como actor global, comprometido y responsable. Alsina ha afirmado que «queremos reforzar las alianzas con los gobiernos y las comunidades extranjeras y construir una cooperación estratégica que incluya los principales actores sociales, económicos y culturales». La consellera ha recordado «la potencia comercial exportadora e importadora de Barcelona y Catalunya», que se explica gracias a la fortaleza del Puerto de Barcelona.

La segunda parte del encuentro ha estado centrada en la visita marítima que la Autoridad Portuaria de Barcelona ha ofrecido a los asistentes al encuentro, donde han estado acompañados por el presidente del Puerto de Barcelona; por el jefe de Gabinete de Presidencia y Relaciones Institucionales, Joan Pere Gomez Comes, y por el jefe de Relaciones Internacionales, Manuel Galán.

Gerard Figueras, secretario d’Acció Exterior del Govern; Victòria Alsina, consellera d’Acció Exterior i Govern Obert; Damià Calvet, presidente del Port de Barcelona, y Manuel Galán, jefe de Relaciones Internacionales