La Comisión de Carga Aérea y Seguridad Logística de Barcelona-Catalunya Centre Logístic (BCL) organizó el martes 7 de marzo una jornada que bajo el título “La gestión de los muelles en las terminales: un desafío para el ecosistema de carga aérea” sirvió para analizar el funcionamiento y la situación actual de estas instalaciones aeroportuarias.

El director general de BCL, Santiago Bassols, fue el encargado de dar la bienvenida a los numerosos profesionales de la comunidad de carga aérea de Barcelona que asistieron a esta sesión, y aprovechó el momento para dar a conocer diferentes actividades y acciones relacionadas con la innovación y la difusión de información y conocimiento que está implementado la entidad.

A continuación, Jaume Adrover, director general de GPA y responsable de la Comisión de Carga Aérea y Seguridad Logística, presentó a los distintos ponentes de la jornada.

El CargoKiosk de WFS

Los primeros en intervenir fueron Marc Grau, Station Manager de WFS, y Rosa Miguélez, CSP Porject Manager de WFS, para explicar el funcionamiento y puesta en marcha del CargoKiosk WFS.

CargoKiosk es una herramienta creada por Worldwide Flight Services (WFS) que se pondrá en marcha el 1 de abril en la terminal de handling de esta compañía ubicada en el aeropuerto de Barcelona y que permitirá digitalizar numerosos procesos implícitos en las operativas de carga aérea.

El CargoKiosk WFS es un terminal similar a un cajero automático que permite la recepción y expedición automatizada de la documentación asociada a las mercancías aéreas y que pueden utilizar los transportistas para realizar los trámites en las terminales de handling, ahorrando tiempo.

Su funcionamiento es sencillo: el transportista se acredita mediante su DNI o Pasaporte y a continuación se imprime su carta de registro, que incluye un número PIN, que es la que tiene que entregar al agente o empresa de transporte para que el transportista sea incluido en la lista de “transportistas de confianza, realizándose el alta una sola vez por transportista”, indicó Marc Grau.

Tras este primer paso, hay que iniciar sesión en la plataforma Freightstation para obtener las credenciales oportunas (de empresa de transporte o agente) y, a partir de este momento, ya se pueden realizar distintas gestiones y obtener información sobre el envío preanunciado o la reserva de franjas horarias, así como obtener la asignación de muelles y el Slot Booking –estas dos operaciones se implementarán próximamente.

Una vez realizado este trámite, a través del CargoKiosk, y tras completar distintos pasos (seleccionar la partida importada, el AWB, el vehículo y su matrícula) el transportista obtiene información para la recogida de las mercancías de importación, imprimiéndose la hoja de entrega (CFT) que tiene que presentar en el almacén.

En el caso de las mercancías de exportación, el proceso es igual al de importación, aunque estará operativo en el CargoKiosk WFS a partir, probablemente, del 15 de abril.

Tanto Marc Grau como Rosa Miguélez animaron a la comunidad de carga aérea a utilizar esta solución de digitalización de los procesos documentales asociados a la carga aérea por tratarse “de un modelo que permite la anticipación y, por tanto, un ahorro muy importante de tiempo”. Utilizar CargoKiosk WFS “da fiabilidad a la cadena y agiliza los procedimientos documentales”.

Vellore y Air Freight Solution de Portel

La siguiente intervención fue la de Santos Martínez, gerente de Portel, que explicó detalladamente el funcionamiento de Vellore, el Cargo Community System impulsado por Aena, que ya están utilizando los operadores que intervienen en el transporte de carga aérea, de momento para operaciones de importación.

Vellore permite “agilizar a través de la digitalización los procesos de la cadena logística aérea evitando el uso de papel”, indicó Santos Martínez, “porque conecta a agentes de handling, transitarios, empresas de transporte, transportistas y conductores, además de a la administración pública como Aena y la Aduana”.

En esta plataforma, el operador puede encontrar información de todos los vuelos en todos los aeropuertos, puede generar órdenes de carga, así como registrar automáticamente los manifiestos de carga y solicitar citas para la recogida de mercancías en las terminales de handling. Asimismo, Vellore ofrece información completa de autorizaciones e inspecciones aduaneras, además de la posibilidad de pedir otros servicios asociados a la mercancía, como desconsolidaciones o transporte, entre otros.

Respecto a Air Freight Solution (AFS), Santos Martínez, indicó que “es muy similar a Vellore, aunque ya hace unos cinco años que existe y se diseñó para procesos de exportación de carga aérea”. Por esta razón, Portel está trabajando “para hacer confluir ambas plataformas digitales, integrando todos los procedimientos de AFS en Vellore”. Asimismo, en Vellore “ya estamos incorporando otras funcionalidades que nos han sido solicitadas por la comunidad de carga aérea como, por ejemplo, la digitalización de los procesos aduaneros, la validación de los transportistas terrestres para que puedan subir al sistema sus credenciales, o la inteligencia artificial para el análisis de datos y que puedan hacerse prognosis”.

Otros modelos de digitalización en Europa

La intervención de Francisco Rizzuto, Regional Head of Air Freight for Europe South de Rhenus Logistics, sirvió para conocer otros modelos de organización de las operaciones de carga aérea en Europa, concretamente en los aeropuertos de Londres-Heathrow y Milán-Malpensa.

Francisco Rizzuto empezó señalando que “la congestión en las terminales y muelles de carga es un problema común en todos los aeropuertos europeos” y esta situación ha llevado a intentar implementar soluciones que, en el caso de Londres y Malpensa, “no han llegado a funcionar”.

Por ejemplo, en Londres-Heathrow, y tras distintas iniciativas sin éxito, “ya hace tiempo que se plantearon trasladar toda la actividad terrestre vinculada a la carga aérea a una zona apartada del aeropuerto”. Para ello, crearon pre-almacenes fuera del recinto aeroportuario para la entrega y recepción de carga aérea pero, “como la aduana no llegó a implicarse, esta iniciativa fracasó y no llegó a funcionar nunca”, explicó Francisco Rizzuto.

En el caso de Milán-Malpensa, para agilizar la operativa en las terminales, la aduana permitió que la mercancía “fuera a almacenes externos o secundarios que pertenecen a operadores autorizados”. Es en estos almacenes en los que “se acaba de tramitar la entrada o salida de la mercancía”. Pero esta no fue ninguna solución porque “el problema de la congestión que había dentro de las terminales de handling se acabó trasladando a estos almacenes externos”. Además, “la aduana daba citas con cuentagotas a los transportistas para la entrega o recogida de carga aérea”, lo cual motivó que se produjeran “enormes colas que colapsaban las carreteras de acceso a estos almacenes, impidiendo la circulación”.

Ahora, tras el fracaso de esta iniciativa, el aeropuerto de Malpensa ha puesto en marcha “el tercer intento de solventar los problemas de congestión en las terminales de handling”. Se trata de un “Smart Cargo City que han implementado desde hace dos semanas y del que todavía no sabemos si llegará a funcionar bien”.

La experiencia de los usuarios

La última parte de la jornada fue una mesa redonda en la que, junto a los anteriores ponentes, participaron Alfred Lorman, Director Air Freight Europe, Middle East and Africa de Kerry Logistics, y Daniel Carreras, Responsable de Operaciones de Cualde Logistics.

Los responsables de Kerry y Cualde, expusieron los principales problemas que, como proveedores de servicios logísticos para las empresas exportadoras e importadoras, se encuentran en las terminales de carga aérea.

A modo de ejemplo, expusieron los inconvenientes más habituales con los que se encuentran en el handling, como la falta de personal de handling para atender el volumen de recogidas o entregas de mercancía que se concentran en unas determinadas franjas horarias; las discrepancias de peso de las mercancías en origen, que provocan demoras porque deben pesarse de nuevo en la terminal; o la falta de muelles para carga segura y los pocos muelles disponibles para carga/descarga, lo cual genera que los vehículos tengan que esperarse hasta tres o cuatro horas para entregar o recoger la mercancía.

Para conseguir evitar esta ralentización de los procesos en las terminales, los participantes en la mesa redonda convinieron en que todas las partes tiene que ir más coordinadas para que todos los procedimientos sean más efectivos. Y una manera de empezar a revertir la situación de congestión y gestionar con mayor agilidad las terminales de handling es utilizar las herramientas de digitalización que se están poniendo en marcha en el sector. Aunque su utilización masiva será lenta, se perfilan como una solución de futuro.